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Celebrada con gran éxito, la primera jornada del proyecto Life+ Climagri

El evento que tuvo lugar en Sevilla, organizado por ASAJA-Sevilla, uno de los socios del proyecto, sirvió para presentar al gran público, algunas de las claves que sentarán las bases para la mitigación y adaptación de la agricultura al cambio climático en toda la cuenca mediterránea.

El encuentro, celebrado el pasado 23 de junio en la sede de la Fundación Cruzcampo, contó con la participaron más de 200 agricultores, y en dicho foro, además de presentarse el proyecto, se aprovechó para analizar la evolución de las campañas de cereal y girasol en Andalucía, entre otros asuntos.

La jornada fue inaugurada por el Director General de la Producción Agrícola y Ganadera de la Consejería de Agricultura, Rafael Olvera, y por el presidente de ASAJA-Sevilla, Ricardo Serra, quien agradeció la colaboración de la Fundación Caja Rural del Sur, Heineken, Bayer Cropscience, Eurosemillas, Syngenta, Agrovegetal y Asegasa.

Tras el acto de inauguración se presentó el proyecto Life+ Climagri "Buenas prácticas agrícolas frente al cambio climático: integración de estrategias de mitigación y adaptación". Como explicó el Director Ejecutivo de la Asociación Española de Agricultura de Conservación Suelos Vivos, Emilio González, el sector agrario es uno de los que puede verse más afectado por el cambio climático, que podría influir negativamente en los rendimientos agrícolas. Por ello es necesario llevar a cabo una adaptación a tiempo y tomar medidas para mitigar los efectos del clima y sus consecuencias económicas, sociales y ambientales, teniendo en cuenta el importante papel que desempeña el sector agrario como proveedor de alimentos, de bienes y servicios ambientales.

Asimismo, Emilio González resumió las conclusiones tras cuatro años de estudio en campo del proyecto Life+ Agricarbon, que a lo largo de cuatro años ha mostrado la eficacia de sistemas sostenibles como la agricultura de conservación con un gran potencial en la reducción de la concentración de CO2 en la atmósfera. Este modelo de agricultura está basada en la reducción total o parcial de la labranza del suelo, manteniéndolo protegido con una cubierta vegetal permanente combinado con técnicas ancestrales como la rotación de cultivos y otras más novedosas como la agricultura de precisión, en la que se realiza un uso más eficiente de insumos gracias al uso de las nuevas tecnologías basadas en los sistemas de posicionamiento global y la aplicación sitio-específica de insumos.

Tras la presentación del proyecto, se trataron otros temas de interés relacionados con el proyecto, que versaron sobre la evolución de la producción de cereales en la recién terminada campaña, así como las soluciones técnicas y oportunidades ofrecidas desde el sector para hacer frente a las incertidumbres existentes en los ecosistemas agrícolas fruto del cambio climático.